Limites.
Comprender y aprender que cosas te hacen bien a nivel espiritual para poder desarrollarse en un plano materia. Ese es el tema de hoy, como cuidar nuestra energía para llevarla siempre al máximo y que nos guie para materializar y cumplir nuestros objetivos.
¿Podemos definir las relaciones sociales como intercambio de energía e información? y si la respuesta es sí, ¿Cómo filtramos las malas energías? ¿Cómo nos protegemos?. Ser una persona que atrae miradas y atención tanto por vías virtuales como en la vida, es un trabajo espiritual enorme, requiere responsabilidad para consigo mismo. Cuando una persona esta en un proceso de autoconocimiento y reconstrucción tiende a atraer personas, buenas y malas, unas que fortalezcan la energía motora y otras que la apacigüen, también puede ocurrir que en ciertas áreas una persona nos nutra pero en otras nos desgaste.
Esto en lo personal me agota, requiere mucho esfuerzo extra de lo que ya estoy invirtiendo en mi misma, y lo malo es que no me doy cuenta hasta llegada el final de la velada, entonces necesito muchos días para recuperarme, esto me hizo pensar ¿Será que puedo controlar la cantidad de energía que entrego en ámbitos sociales? La respuesta es sí, y la tarea son los limites.
Conocer los limites personales, a un punto excesivo. ¿Qué lugares nos nutren energéticamente?, las personas transmiten energías diferentes dependiendo el ámbito en que se encuentran, esto no solo aplica para reuniones sociales grandes también podemos referirnos personas individuales.
Cuidar nuestras ganas de comernos al mundo es un trabajo diario y muy cansado que requiere limites claros, no vale que tengamos seis meses buenos y seis meses malos, sí se valen dos días de menor esfuerzo pero cuatro dándolo todo.
Limites, para cuidarnos nosotros y al resto, para sentirnos plenos y de alto valor.
_Perez Muñoz Valentina
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